Premio Nobel de Literatura

115 años del nacimiento de Miguel Ángel Asturias Rosales
Por: Ernesto Sitamul

Nació el 19 de octubre de 1899, en el barrio de la parroquia vieja de la ciudad Guatemala, cuando gobernaba el país, quien sería el dictador de los 22 años, Manuel Estrada Cabrera.
Sus padres fueron Ernesto Asturias y María Rosales, quienes además procrearon a Marco Antonio.
Obtuvo su bachillerato en el Instituto Normal Central para Varones. En plena juventud estudiantil, ingresa a la Facultad de Medicina, pero la abandona, para inscribirse definitivamente en la facultad de Derecho de la USAC, donde obtuvo el título de abogado y notario, con su polémica tesis “El problema social del indio”.
Para entonces, el pueblo de Guatemala ya sufría otra dictadura, la de Jorge Ubico, que duró 14 años, y que tuvo como desenlace la Revolución de Octubre de 1944.
Siendo Miguel Ángel Asturias un guatemalteco comprometido con el desarrollo de las clases populares, no es extraño que en su vocación literaria y política el tema de las dictaduras, lo cual explica su obra El Señor Presidente. Precisamente por ese clima política de intolerancia, la obra no se pudo publicar, sino hasta 1946, cuando Guatemala había iniciado el período conocido como la primavera democrática, siendo presidente el humanista Juan José Arévalo Bermejo.
Para entonces, Asturias Rosales –casado en primeras nupcias con Clemencia Amado (1939)- había procreado a Rodrigo y Miguel Ángel.
Su obra “Hombres de maíz” es considerada por la crítica como una de sus obras trascendentales, que, junto a “El Señor Presidente” y “Leyendas de Guatemala”, habría influido para ganar en 1967el Premio Nobel de Literatura.
También obtuvo el Premio Lenin de la Paz.
Miguel Ángel Asturias Rosales murió el 9 de junio de 1974 en Madrid, España.
Y para exaltar a nuestro Premio Nobel de Literatura, en la fecha de su nacimiento he copiado unas notas contenidas en el libro “Páginas de lumbre de Miguel Ángel Asturias”, cuya compilación corresponde al escritor Francisco Morales (s/f), donde aparecen apelaciones a la ciudad de La Antigua Guatemala y al santo varón Hermano Pedro.
Por ejemplo, sobre historia de espantos y leyenda:
“El sombrerón recorre los portales de un extremo a otro; salta, rueda, es satanás de hule”.
“En la primera ciudad de los conquistadores –gemela de la ciudad del Señor Santiago- pasos de ciudad colonial…voces de clérigos que mascullan Ave-Marías…”
-En Antigua, segunda ciudad de los conquistadores…el espíritu religioso entristece el paisaje; se siente una gran necesidad de pecar”.
-“Estamos en el tempo de San Francisco…aquí se han podrido más de tres obispos y las ratas arrastran malos pensamientos”.
Asturias nos recuerda en esas notas de lumbre, que el hermano Pedro llegaba a orar a San Francisco, después de la media noche, y que más de alguna vez se encontró con la Llorona.
Valle de Panchoy, 19 de octubre de 2014.