Aprovechará aguas del Río Naranjo
La Municipalidad de San Pedro Sacatepéquez, departamento San Marcos (occidente de Guatemala), ejecutará un proyecto hidroeléctrico por Q.40 millones, para aprovechar las aguas del río Naranjo, en la aldea Corral Grande. De acuerdo con información aparecida en Prensa Libre (18-08-2012), el proyecto habrá de concluir en 2015, y partir de entonces “ya no compraría energía al Instituto Nacional de Electrificación” (Inde).
El proyecto es interesante, primero,
porque se diferencia de las empresas municipales compran energía al Inde, a
precio preferencial, para luego vender a los usuarios del municipio, y segundo,
porque en estos casos no suscita las reacciones adversas de grupos
ambientalistas.
La nota periodística consigna que el
gobierno edil de San Pedro Sacatepéquez vendería energía más barata a los
usuarios, con respecto a las tarifas que cobra en la actualidad la empresa
Deocsa. Las proyecciones son optimistas, porque el proyecto podría producir más
de la cantidad de energía que necesita ese municipio, por lo cual considera que
podría venderle al municipio vecino, San Antonio Sacatepéquez.
Una empresa
estatal o municipal no tiene, necesariamente, la finalidad última de producir
ganancias, pero como me dijo un amigo “tampoco tiene vocación de pérdidas. En
otras palabras, la energía que produzca este proyecto tiene que pagarse con el
monto de lo que paguen los usuarios, porque de lo contrario, la municipalidad tendría
que utilizar recursos de otros rubros para dar subsidio cuando se tienen
pérdidas.
Deudas municipales al Inde
Las empresas municipales de energía
eléctrica adquieren del Instituto Nacional de Electrificación energía, con
tarifa preferencial, lo que se supone redunda en beneficio de los usuarios en
cada municipio donde funcionan estas empresas.
Sin embargo, las finanzas de éstas no están
sanas, si tomamos en cuenta la creciente deuda que tienen con el Inde, la cual se sitúa en Q894 millones, de acuerdo
una nota periodística de Siglo 21. Esta deuda corresponde a las empresas
eléctricas municipales de Quetzaltenango, Huehuetenango y Jalapa, según lo
expresado por el gerente general del Inde, Marinus
Boer.
La más endeudada es la comuna
quetzalteca, con Q780 millones, cuyo monto se encuentra en un proceso de
regularización, sin atisbos de convenio de pago. La de Jalapa está intervenida
formalmente por el Inde, con una deuda de Q67 millones y la de Huehuetenango tiene
pendiente pagar Q47 millones. En ambos casos hay procesos de negociación para
alcanzar acuerdos.
La deuda la empresa municipal de
Quetzaltenango crece Q14 millones mensuales, dentro de un contrato de que data
de 1978. En aquella época, la energía contratada era de 8 megavatios y en la
actualidad alcanza los 39 megavatios. En este total, 31 megavatios se facturan
a precio de mercado.
Las tarifas municipales benefician a los
usuarios residenciales, aunque en el caso de Quetzaltenango se ha extendido al
comercio e industria.
¿Por qué se han
endeudado las empresas municipales en energía eléctrica?
Según
el gerente del Inde, “el usuario quezalteco sí paga a la Municipalidad, pero
ésta no paga al INDE, con la excusa de que el contrato de 1978 sigue vigente”.